El Partido Popular sufrió una derrota considerada histórica en las elecciones que se celebraron el pasado 14 de febrero en Cataluña.
Con solo tres escaños alcanzados, el PP sufrió una derrota que para muchos solo puede ser considerada como dolorosa. Una caída que resulta aún más fuerte cuando en contraste con lo alcanzado por el Partido Popular, Vox logró 11 escaños que suman más que la totalidad que hacen el Cs y PP.
Como consecuencia de este histórico declive, el liderazgo de Pablo Casado decae. Un debacle que se da luego de que Casado decidiera meterse de lleno con la estrategia de la campaña del partido y además, a unos cuatro meses de haber tomado la contundente (y que no estuvo libre de sorpresa) decisión de romper definitivamente con el partido liderado por Santiago Abascal.
Una diferencia con los comicios del 2017
Estos resultados marcan una gran diferencia con los comicios que se realizaron en el 2017. Durante el diciembre de ese año, Xavier García Albiol lanzó su candidatura por el Partido Popular obteniendo 185.000 votos de parte de la ciudadanía y uno 4 escaños de los 135 que componen el Parlamento Catalán.
Sin embargo, este resultado de solo cuatro escaños no es comparable a la bajada que sufrió el PP en estos nuevos comicios. Tanto ha sido el declive que sus resultados han comenzado a ser considerados como “los peores en toda la historia de la comunidad”.
Solo consiguieron una representación por Barcelona, lo que no compensa el bajo número de votos y escaños que obtuvieron. La totalidad de lo obtenido por el PP han sido tres actas del 95% de resultados escrutados y solamente un 3,80% del apoyo en votos. La realidad es que no pudieron acercarse ni siquiera un poco al objetivo que tanto buscaban de obtener un puesto parlamentario propio dentro del Parlamento.
Reconociendo los terribles resultados
Tras los anuncios de las actas escrutadas, Alejandro Fernández, presidente del PP y quien es también candidato a la presidencia de Generalitat, reconoció de forma pública lo terrible que fue el no poder lograr ninguno de los objetivos planteados desde el inicio de la campaña.
Admitió que no pudieron incrementar sus votos ni formar un grupo propio. Todo esto al mismo tiempo que hizo una declaración lamentando que la participación ciudadana se haya desplomado tanto, y que el constitucionalismo es el que se ha visto más afectado por esta falta de presencia de los ciudadanos.
Un resultado muy alejado del 2012
El último resultado que el PP obtuvo se aleja de los números obtenidos en 2012. En los comicios de ese entonces Alicia – Camacho logró uno de los mejores resultados con 19 escaños y 12,98 % (471.681 votos). Aunque al final fue relegado al quinto lugar por los socialistas catalanes y el ERC, quienes obtuvieron 20 y 21 escaños respectivamente.
2010 también fue año en que las cosas pintaron mejor que en la actualidad, ya que Sánchez Camacho se convirtió en la tercera al conquistar un 12,34% de los votos y ocho diputados del Parlamento Catalán.
Históricamente la segunda mejor posición que ha alcanzado el partido PP en votos fue en el año 1995, cuando Alejo Vidal-Quadras, quien era entonces el presidente del partido en aquella época obtuvo 14,0 % de los votos (421.752) y 17 escaños.
Pero estos no fueron los únicos años en los que el PP fue mucho más afortunado en unas elecciones. Y es que en 2003 y2006 tuvo una buena racha consiguiendo 15 actas en la primera ocasión y luego 14 diputados gracias al apoyo que recibió quien encabezaba el partido el exministro de Asuntos Exteriores Josep Piqué. Aunque Piqué presentó en 2007 su dimisión a causa de la imposición de “Génova” de forma directa al equipo de campaña.
En la historia del partido quienes lo han encabezado tienen el registro de haber logrado un apoyo mayor que el de estas últimas elecciones. En 1999 Alberto Fernández Díaz era la cabeza y alcanzó 12 diputados. Mientras que en 1992, 19998 e incluso en 1984 cuando colisionó con el Partido Demócrata Popular y Unión Liberal, sus resultados le posicionaron con 11 escaños y 221.601 de sufragios.
Silencio ante los malos resultados
Todo el proceso de escrutinio ha sido seguido por el presidente del PP, Teodoro García Egea y; quien es el secretario general de la información junto a vicesecretarios generales. El conjunto de representantes siguió los comicios desde la séptima planta del edificio de la calle Génova 13.
En el momento en que fueron anunciados los resultados oficiales, el declive de los resultados causó un absoluto silencio durante esa noche en la que de forma oficial, no se habían realizado ninguna valoración al llegar al 95% escrutado y que se convirtió en una situación que cambió el clima del partido por uno hermético.
Toda esta situación desfavorable para el rumbo del partido causó que la esperanza que el PP tenía hasta hace un par de meses de duplicar sus escaños comenzará a desvanecerse. Mientras la campaña electoral esos objetivos una vez planteados se volvían cada vez más lejanos y a esto se le sumó la avanzada del Vox, que en estos comicios ha sufrido una repercusión mediática.
Una convocatoria por los resultados
Luego de conocer los malos resultados, el partido anunció una convocatoria que reuniría al Comité Ejecutivo Nacional que conforma el partido, junto a los “barones” de los territorios, con el fin de discutir la situación del partido.
Además, el papel de Casado también se discutiría en relación a todos aquellos que podrían considerar que su liderazgo «no estuvo a la altura. Para el PP que no se puede poner en tela de juicio su liderazgo, cargo que le fue otorgado cuando fue elegido hace casi tres años en el proceso de primarias donde los militantes del partido participaron.
Europa Press consultó diversas fuentes del PP y señaló que para Casado esta difícil situación viene heredada desde el 2017 con el revés sufrido luego de la implementación del artículo 155 de la Constitución que causó que los ciudadanos fueran rentabilizados. Una causa que se une a la factura que estas elecciones les ha cobrado.