China ha prometido que en los próximos meses serán enviados millones de vacunas de contra el COVID-19 a todo el mundo.
En el Aeropuerto Internacional de Shenzhen, ubicado al sur de China ha comenzado la actividad en las habitaciones que contendrán las dosis de vacunas contra el coronavirus que serán transportadas a nivel mundial.
Los compartimientos se componen de una hilera de cámaras blancas que a través de una pantalla, muestran cuál es el nivel de temperatura del interior de la habitación.
Estos compartimientos cuentan con un sistema de clima controlado para regular la temperatura en la cual deberán mantenerse las vacunas para su preservación. Para ingresar, obligatoriamente se debe contar con todo el equipo de bioseguridad que corresponde: guantes de goma, mascarillas y bata quirúrgica, así como un traje de protección especial de cuerpo entero. Además, es imposible acceder sin antes haber pasado por el punto de control de un guardia de seguridad.

Con todas estas medidas de control se busca resguardar las habitaciones donde serán almacenadas las vacunas contra el COVID-19 fabricadas en este país, luego de que reciban la aprobación de los entes reguladores para la distribuir las dosis. Una vez se reciba, las vacunas serán enviadas a todo el mundo.
El gobierno chino ha anunciado que durante los próximos sus vacunas comenzarán a enviarse a los países en los que han realizado de forma exitosa las pruebas para la última etapa de la vacuna.
Una campaña que busca restaurar la imagen
El anuncio de China forma parte de una campaña que busca restaurar su imagen luego de los eventos ocurridos durante el inicio de la pandemia. La forma en la que China manejó el comienzo de los brotes del virus dañó fuertemente su imagen.
Sin embargo, con estas acciones en lugar de ser recordada como uno de los culpables de la pandemia, sería considerada por su potencial ayuda para la erradicación de la pandemia.

Según expertos en salud global y relaciones exteriores, China podría utilizar las dosis de vacunas contra el COVID-19 como un instrumento que le permitiría proyectar una imagen diferente ante el medio internacional.
Durante los primeros meses de pandemia, el gobierno chino brindó su apoyo al mundo con suministros de bioseguridad a los países que resultaron más golpeados por el virus. Pero este gesto repercutió de manera un tanto negativa, ya que surgieron informes de que los suministros que estaba entregando China eran de baja calidad. Sin contar que se habló de la campaña de desinformación con el fin de cambiar el hilo narrativo de la historia del coronavirus.
Con el envío próximo de vacunas a diferentes países, China podría tener una herramienta diplomática que le abra las puertas a una segunda oportunidad.
¿Qué vacunas son candidatas contra el COVID-19 en China?
En China hay cinco vacunas que están dentro de la fase 3 para ser consideradas para la aprobación oficial.
Las cinco vacunas pertenecen a cuatro empresas diferentes que buscan ser la primera en ser aprobadas.

Sus ensayos clínicos debieron ser realizados fuera de sus fronteras. Tras el control de la pandemia en este país, se debió realizar fuera de sus fronteras la eficacia de su medicamento.
Hasta el momento, en 16 países se han realizados los ensayos clínicos de fase 3.
Se ha llegado a un acuerdo con los países donde se han realizado las pruebas para a brindarles acceso a las vacunas. De igual manera, se han acordado términos para el aporte de los conocimientos tecnológicos necesarios que permitan su fabricación local.
Brasil y Turquía han firmado acuerdos con la farmacéutica Nasdaq, que tiene sede en Beijing, para obtener 46 millones y 50 millones de vacunas respectivamente. Asimismo, Indonesia es otro de los países que se ha sumado a este acuerdo, con 40 millones de vacunas que serán enviados para dar inicio a la producción local.

Por otro lado, China National Biotec Group (CNBG), quien forma parte de la farmacéutica china National Pharmaceutical Group (Sinopharm) cuenta con dos vacunas que son candidatas, y que están siendo probadas en 10 países; entre los que se encuentran Suramérica y Oriente Medio.
En los Emiratos Árabes, esta empresa ha conseguido que su vacuna sea aprobada en estado de emergencia. Y el próximo año se espera que comiencen a producirse más de 75 millones de vacunas gracias a la asociación de una empresa emiratí con Sinopharm.
Según Sinopharm, en la actualidad existen varios países que ya han solicitado las vacunas.
¿Cómo serán trasportadas las vacunas chinas?

A diferencia de las vacunas de Moderna y Pfizer, las vacunas de China tienen una ventaja considerable: no es necesario su transporte en frío.
Para el transporte de las vacunas contra el coronavirus que han sido tomadas en cuenta en Estados Unidos y Reino Unido es necesario un equipo de almacenamiento en frío. Pero la mayoría de las vacunas del gigante asiático no requieren ser almacenadas en temperaturas bajo cero.
Esto representa una ventaja considerable cuando se trata de distribuirlas y transportarlas; en especial, en aquellos países en desarrollo en los que acceder a esta clase de equipo es sumamente complicado.
La razón de que las vacunas deban ser almacenadas en frío es que para su desarrollo ha sido utilizado fragmentos de material genético conocida como ARNm (ARN mensajero). Los fragmentos del ARNm envían un mensaje al cuerpo para que produzca partes sintéticas el virus con el fin de lograr la estimulación del sistema inmune del organismo.

Esta es una nueva tecnología que ha sido implementada para esta clase de vacuna. Aunque la única desventaja es que el ARNm debe ser almacenado en frío o de lo contrario, se degradará, lo que causa que la vacuna se dañe.
Contraio a esto, las empresas chinas que están dentro de la carrera del desarrollo de la vacuna, utilizan el mismo enfoque que es usado en las vacunas de la gripe y el polio. En estos casos, las vacunas deben mantenerse a una temperatura de entre 2˚C y 8˚C para mantener su efectividad.