Tras una tormenta entre ambos partidos, el PSOE y Podemos intentan llegar a un acuerdo para salvar una ley que podría poner en riesgo las alianzas del Ejecutivo.
El modelo para regular los alquileres en España desató todo un choque entre los partidos, pero con el fin de salvar la futura Ley de Vivienda, los partidos entraron en negociaciones para aliviar las tensiones y llegar juntos a un consenso.
Tanto para el PSOE como para Podemos el consenso significa la supervivencia de la alianza de dos socios del Gobierno, luego de toda la tensión acumulada entre los partidos.
José Luis Ábalos, ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, hizo un gesto de ofrecer una mano al PSOE, tras las advertencias de parte de Pablo Iglesias.
Una nueva propuesta de bonificaciones
La nueva propuesta de bonificaciones que incentivaría a los propietarios a disminuir las rentas de sus alquileres fue presentada por el Partido Socialista. Sin embargo, Ione Belarra, secretaria de Estado de Agenda 2030, calificó la propuesta como insuficiente y consideró que esta no respeta los compromisos de limitación de precios firmado por el PSOE en el Compromiso para los Presupuestos Generales de Estado y en los acuerdos de Gobierno.
El vicepresidente Iglesias señaló el acuerdo y por su parte, Irene Montero, Ministra de Igualdad, lanzó la advertencia que de no ser cumplido, se retiraría el apoyo a la ley. Montero afirmó que “Solamente podría salir si sigue adelante con el incumplimiento del acuerdo de Gobierno con el apoyo del PP, con el cambio de socio por parte del PSOE”.
El ministro Ábalos se encuentra al frente del departamento que adelanta la ley desde sus inicios. En una rueda de prensa comentó que la ley solo nacerá del acuerdo, ya que los miembros socialistas cumplen con sus compromisos y gobiernan en serio. Además mencionó que piensa que finalmente y tras muchas polémicas, podrán llegar a un acuerdo.
Asimismo, Ábalos destacó que la ley de vivienda logrará frenar los incrementos abusivos de los alquileres. La norma también favorecerá la oferta de viviendas dentro de condiciones que sean accesibles para aquellas personas que tengan menos renta, los jóvenes y especialmente los grupos más vulnerables. El ministro también recalcó que la norma ayudará a regular las políticas de vivienda como un servicio de carácter público y de interés general, así como también coment6ó que continuarán trabajando sin descanso para las viviendas públicas que no sean enajenadas al igual que como hizo el partido PP.
Dos fórmulas diferentes
La principal problemática que originó la tormenta es que los dos partidos manejan fórmulas diferentes para frenar las subidas “abusivas” de los alquileres de viviendas en España. A esto se le suma que ninguna de las dos partes está dispuesta a dar su brazo a torcer.
UP reitera que su partido no apoyará una ley que no incluya la consideración de la limitación de rentas, aunque reconocieron igualmente que en el panorama no está el dejar atrás aún la mesa de negociación. Y la misma postura la mantiene el PSOE.
A pesar de los roces y falta de acuerdos, para ambos es crucial la futura ley de viviendas. Cada uno de ellos tiene razones diferentes de por qué la ley es tan importante para sus partidos.
En el caso de los socialistas, el Gobierno se comprometió a darle impulso a una ley en un momento en el que acceder a la vivienda en el país se ha convertido en uno de los mayores problemas sociales.
Por otro lado, para Unidas Podemos, la norma es tan vital porque se trata de su identidad ante el electorado. Algo a tener en especial consideración que a Pablo Iglesias solo le quedan unas pocas semanas para iniciar su campaña electoral para Madrid. Participar en la campaña con la ley de vivienda como recurso sería una gran carta de presentación ante Isabel Díaz Ayuso, por lo que se niegan a renunciar a la norma.
Son razones de peso por las que ninguno de los dos partidos quiere dejar ir todavía las negociaciones, incluso cuando ambos bandos han incumplido con los plazos. Fuentes cercanas a las negociaciones, aseguran que si bien ninguno de los dos se atreve a poner nuevas fechas, lo realmente importante es que la norma y su contenido salga adelante.
El punto más tenso
Uno de los puntos más tensos en todos estos encontronazos entre ambos partidos vino de parte de Irene Montero que llegó a amenazar con retirar el apoyo a PSOE. Mientras que Ábalos confió en que las cosas no lleguen hasta el borde, porque de acuerdo a su postura “aún existen espacios para converger”.
Una línea en la que ha insistido Carmen Calvo con el cumplimiento de los acuerdos y trabajar sobre los contenidos, aunque al mismo tiempo, considera que no cree posible un ruptura entre socios debido a que las diferencias no son más que parte del día a día en un choque de gobierno.
Las principales diferencias se alejan de una postura y de otra. El frente de Ábalos propone la rebaja de la actual reducción fiscal aplicada a todos los alquileres del 60% a un 50%, y que el porcentaje de las bonificaciones aumente según las características del mercado de viviendas.
Esta reducción fiscal vendría acompañada de intensivos que se establecerían en las zonas de mercado tensionado y que permitirían que los propietarios obtengan un 90% de bonificación si rebajan en un 10% las rentas. Mientras que para aquellos arrendadores que alquilen a jóvenes hasta los 35 años, aplicaría un 70% de reducción.
El concepto de “vivienda vacía es otro punto de conflicto, en el que los socialistas plantean expresamente que “en la regulación del recargo existente en el impuesto sobre vienen inmuebles para estimular el uso efectivo del parque” sea la nueva definición de la norma.
Para el PSOE los ayuntamientos deben poder aplicar un recargo del 50% en los Impuestos de los Bienes Inmuebles que existe para las viviendas vacías, pero de forma que no pueda hacerse efectivo porque “no se sabe” la definición oficial de qué es una “vivienda vacía”. Y busca además neutralizar la propuesta de impuestos directos sobre los muebles que se encuentren ocupados.
Fuentes: https://www.elmundo.es/economia/vivienda/2021/03/22/6058d43721efa0707a8b4667.html