En el video se puede apreciar un grupo de mujeres de Corea del Norte cantando el himno gallego, lo cual fue algo que rápidamente se hizo viral en las redes. Además también hay otro video donde se puede apreciar el mismo grupo de coreanas interpretando una canción popular gallega.
Los comentarios sobre estos videos comenzaron el pasado 27 de abril cuando el español Alejandro Cao de Behós, delegado especial del Comité de Relaciones Culturales en el Extranjero de la República Democrática Popular de Corea, publicó un peculiar video en la red social Twitter.
En el siguiente video se ve un grupo coreano que canta una canción popular gallega. En poco tiempo el video se viralizó y no ha dejado de reproducirse una y otra vez, especialmente en Galicia al igual que el otro video donde interpretan el himno gallego.
Este video fue subido en el año 2017 por Bernardo Valiño, quien fue el promotor del evento donde se llevó a cabo la actuación hace varias décadas, por lo que sorprende que justo ahora se haya vuelto tan popular.
Si no sabes gallego, seguramente te estarás preguntando que dice la canción, pues para despejar un poco la curiosidad te mostramos lo que dice algunos de los versos traducidos del gallego:
«Yo me quería casar. Mi madre, no tengo ropa. Yo me quería casar. Mi madre, no tengo ropa. Cásate, hija mía, cásate; que una pierna tapa a la otra»
Esta es una canción popular en Galicia, y de hecho muchas personas que residen allí se encuentran agradecidos por la interpretación, reaccionando en las diferentes redes sociales con el clásico like.
Una canción popular gallega interpretada con instrumentos asiáticos
Llama la atención el hecho de que los artistas lograron entonar muy bien en gallego al interpretar el Vai Lavar a cara (Vete a lavar la cara), utilizando además los acordes de un instrumento que es tradicional en la cultura asiática
Por lo que se trata de una interpretación que en cierta forma une a las dos culturas al mezclar el canto de la canción gallega interpretada con instrumentos asiáticos. En definitiva es una interpretación que a pesar de los años continua cautivando, por lo que no es de extrañar que 30 años después tras ser publicado en una red social, se haya vuelto viral.
Cao de Behós afirma que gracias a un VHS fue que las intérpretes lograron aprender la letra, con el fin de lograr «La interpretaron en Galicia con motivo de un festival folk».
No hay duda alguna de que el arte no tiene límites al momento de querer expresarlo, y más aun con un motivo tan noble como es el homenajear al anfitrión de un evento. Ya que precisamente la base de esta interpretación radica en hacer un homenaje a Galicia.
Por lo que no es de extrañar que las intérpretes hayan dado el mejor de su esfuerzo con el fin de poder llevar a cabo una interpretación digna de recordar.
Un poco más sobre la historia de esta interpretación…
Esta cinta se forjó en el año 1980, cuando el productor, Bernardo Valiño era el concejal de Culleredo, el cual es un municipio de la provincia de A Coruña. Encargándose de la organización del I Festival Internacional de Folclore celta, el cual se celebraría a modo itinerante en varios pueblos gracias a la creación de un patronato en el que estaban involucrados 15 ayuntamientos.
La actuación de la orquesta coreana en honor a la Romaría Internacional
Con el pasar de los años, fue consolidado con el nombre de Romaría Internacional y así fue celebrado en julio de 1990 en A Estrada, el cual es un municipio que se encuentra en la provincia de Pontevedra.
Hacia dicha provincia viajó una delegación coreana conformada por unos artesanos, un grupo musical, un ballet y una representación del Circo de Pionyang. En honor a los anfitriones, la orquesta de Corea del Norte tenía preparada la popular canción, incluyendo el himno gallego.
La interpretación del himno gallego por parte de los artistas coreanos se puede apreciar en el siguiente video:
En comparación con la actuación compartida por Cao en la que se llevó a cabo ante unas 3.000 personas, la presentación de los coreanos el 25 de julio con motivo del Día de Galicia fue más íntima.
Dicha interpretación fue llevada a cabo en el Panteón de Gallegos Ilustres en Santiago de Compostela, en dicho lugar se encuentran los restos enterrados de Rosalía de Castro y Castelao, entre otros reconocidos gallegos a nivel internacional. En el acto se contó con la presencia de Manuel Fraga Iribarne.
Durante la interpretación de la delegación de Corea del Norte, también se encontraban el presidente de la Xunta de Galicia y varios de sus consejeros, quienes sencillamente quedaron encantados con la interpretación.
Algunas anécdotas sobre el evento
En dicho evento, también se puede decir que en cierta forma terminó siendo una especie de intercambio cultural, ya que además de los gallegos y los coreanos, también se encontraban representantes de México y de la URSS.
Por supuesto algunas anécdotas sobre el evento no se harán esperar, ya que por ejemplo el cronista Lois Blanco, respecto a La Voz de Galicia del 29 de julio de 1990 señala lo siguiente:
«la comunicación es posible, las relaciones afables y buena muestra de ello es ver cómo soviéticos, coreanos y mexicanos se ayudan y alientan unos a otros antes de saltar al escenario. Pero hay un problema de índole gastronómica: el arroz. Los coreanos quieren que todos los platos vayan acompañados con este cereal, pero los rusos han comenzado a quejarse, quizá por padecer su efecto astringente. (…) El colectivo de artesanos de Corea se han ‘solidarizado’ con los soviéticos para no solicitar más arroz».
Definitivamente no hay duda de que fue una experiencia diferente, entretenida, un tanto estresante pero emocionante y algo divertida para todos. Donde a pesar de las diferencias en todos los aspectos, desde el idioma hasta los gustos gastronómicos, supieron adaptarse unos a otros.